Durante el camino, otras personas o grupos podrían engañar a niñas, niños o adolescentes.
Para procurar reducir este riesgo, intenta:
- Mantenerte cerca del grupo con el cual viajas.
- Evitar entregar a tus hijas o hijos a personas desconocidas, aunque parezcan amables o digan que les van a cuidar. Las redes de trata se disfrazan de personas “buenas”.
- Hablar con tus hijas o hijos sobre algunos cuidados como:
- Estar siempre cerca de la persona adulta que les cuida y hablar siempre con ella sobre lo que suceda durante el camino.
- Evitar hablar con personas extrañas sin antes decirlo a la persona adulta.
- Si se siente miedo o confusión, hablarlo con la persona adulta.
- Recordar que nadie puede tocarles, llevarles ni decirles qué hacer si no quieren hacerlo. Si una persona insiste en hacer algo de esto que sea sospechoso, alejarse pronto y pedir ayuda.
Tener mucho cuidado si alguien se acerca ofreciendo trabajo, ayuda, un lugar donde dormir, pidiendo acompañarle sin ofrecer mucha información.


